No dormimos demasiado. Estos gatillos esperan ansiosos un toque ¿Donde esta la fuerza en la que confiábamos? Aquí solo como una simple muleta, quizás eso es los que nos mantiene despiertos toda la noche con una luz encendida.
A pesar de que el que grita simula ¿Que eso que ya no tiene lugar? ¿Puede ser esto en lo que nos convertimos? Muy delgado, con sobrepeso, píldoras para despertar o sedar. Aun no sabemos lo que queremos.
Podemos dejarlo ir ¿Acaso no lo ves? Perder el control. Es ser, finalmente libre. Primero una chispa. Luego una llama !Ahora un incendio! ¡Explotamos!
En la oscuridad de las noches, desconecta, corta el cordón. Las luces están muertas. Ahora sabrán que con todo viene un precio, nada es gratis.
Y cada día estamos divididos entre lo correcto y lo incorrecto, entre la vida y la conveniencia. ¿Por qué perder el sueño? ¿Por qué quejarse? Siempre hay canales que cambian. Es como una amnesia por elección.
Mientras envejecemos en este lugar, y solo terminemos. Borremos, lo que hicieron.
Podrían ser minutos ya idos, podrían ser horas o días, antes de que el abismo se abra, antes de que el suelo se pierda. En esta deuda nacemos. Una deuda que tratamos de reparar. Pero ya oscurecimos el cielo. El humo desprendiéndose del fuego.
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