jueves, 24 de febrero de 2011

¿Es que todo es una fachada?

Hay un rostro que nos ponemos en la fría luz del día. Es la máscara de la sociedad, es la forma de la sociedad, y la verdad es que...,¡todo eso es una fachada!

Hay un rostro que esconder hasta que la noche aparece ¿Y qué se esconde en el interior, detrás de todos nuestros temores? ¡Es nuestro verdadero yo, encerrado dentro de la fachada!

Todos los días, la gente, se fija tanto en su propio camino. ¿Como para agregar una capa de pintura a su vida? ¡Y ser lo que no lo es!

Así es como, nuestra pequeña, el juego es jugado, viviendo como en un baile de máscaras mientras actúo de forma extraña manteniendo una farsa ¡Mientras se reproduce la mentira!

Pero hay una cosa que sé, y lo sé con seguridad: "Esta enfermedad que tenemos tiene cura, y estoy seguro de que la vida es terriblemente difícil..., cuando tu vida es una fachada.

¡Mira a tu alrededor! No he encontrado, no se puede saber, por mirar en la superficie ¡Ver esa cara! Ahora, estoy dispuesto a apostar, que lo que ves no es lo que recibes ¡Porque el hombre es un maestro del engaño!

Entonces, ¿cuál es el siniestro secreto? ¿La mentira que se dicen es verdad? ¿Es que cada hombre a cumplir en la calle, no es un hombre, sino dos?

Casi todo el mundo que ve, al igual que él una ella. Y usted, un yo. Finge ser un pilar de la sociedad ,un modelo de corrección ,sobriedad. Una piedad ¿Quién se estremece al pensar que todos somos una fachada?

¡Hipócritas!

¡Hay predicadores que matan! ¡Hay asesinos que predicara el Evangelio! ¡Hay maestros que mienten! ¡Hay mentirosos que enseñan! Tomé la selección de ayer, querido ¡Porque todo es una fachada! No somos uno, sino dos ¿Estamos bien o mal? No caminamos en la cuerda floja ¿Que nos pasaría si pudiéramos cruzarla? ¿Estamos en espera para vivir a través de una fachada?

Me inclino a pensar que la mitad de la humanidad piensa que la otra mitad es ciega. No sería una sorpresa encontrar que todos están en complicidad.

Al final del día ,no me refiero a lo que dicen, ellos no dicen lo que quieren decir, y la respuesta: ¿Es que todo es una fachada? El hombre no es uno, sino dos. Él es malo y bueno. Uno camina por la fina línea que habríamos cruzado si hubiéramos podido, el otro se esconde en las profundidades de la verdad.

Es una pesadilla el nunca poder descartar la posibilidad de ser como eres. Así que nos quedamos en guardia, aunque nos encanta la fachada que mantenemos, pero..., ¿qué hay detrás de la fachada?

Mentiras.

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