El cielo es claro y bastante... El aire era rápido y todavía... Ahora no soy uno de los de olvidar pronto. Voy a apostar y nunca lo haré.
Recogidos por un momento, la perfecta ironía, un impecable nuevo comienzo eclipsado por la tragedia.
El extraño, no invitado, comenzó a bailar en su propio..., por lo tanto, dijo adiós al creciente orgullo. Y hemos hecho nuestro camino de vuelta a casa.
La vida era tan simple entonces, éramos tan inocentes. Padre y madre. La celebración de uno al otro.
Sin previo aviso de ninguna parte, al igual que una bala de la noche, goma de borrar y de acero rápido, abrasador fuego, brillante luz.
Gritos de terror de miedo el dolor, sonidos del silencio de humo en los ojos. Silenciosa quietud de negro silencio. No más gritos, ni más gritos.
Hambre, frío y miedo desconcertado. Desgarrado, roto, asustado y aturdido.
Situada en la mesa familiar, en alguno lugar estoy siendo saludado por un extraño, un hombre sin rostro. Él dijo: "Hijo, ¿te acuerdas, por lo que incluso sabes tu nombre?". Luego brilló una luz en los ojos y dijo: "Toma esto por el dolor"
Irremediablemente deriva de baño en la hermosa agonía. Estoy perdido sin cesar la caída en esta maravillosa miseria. Pacífica en la sedación que puede tener una forma, y todo el pánico comienza a desaparecer dentro de la irremediablemente deriva de baño en la hermosa agonía.
"Dime si te hace daño", dijo el hombre sin rostro. "¿Puedes mover todos los dedos, te puedes tratar a tu mejor posición?" Le pregunté acerca de los otros "¿Están todos bien?" Me dijo que no me preocupara, ya que se volvió y miró desde la distancia.
Día tras día, noche tras noche y jugamos a los acontecimientos que ve la luz roja. Una y otra vez, escena por escena, como una pesadilla decolorada, perseguido por los sueños.
¿Cómo pude prepararme para lo que sucedió después? Es algo que tiene que ver con tu padre. Es un milagro, que él viviese es una bendición.
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