Este blog me ha aportado inmensidad de cosas: saber que se escribir (antes de esto no lo sabía), expresarme y "hacerme entender", plasmar mis problemas y mis pasiones con historias sin sentido, publicitar grupos a los que amo, criticar películas que me han encantado.
Muchas cosas me ha aportado este maravilloso blog. Seguiré escribiendo, con menos frecuencia, pero seguiré.
DESPEDIDA
Las clases, los pasillos, los pupitres, las sillas de distinto tamaño, las cuatro paredes del mismo color, la chino-pizarra, los olores a sopa pasada y a humanidad, las broncas, los consejos, los bolígrafos explotados, los dibujitos y las tres en raya dibujados en los cuadernos de cada asignatura, los malditos ventiladores, los trabajos, los exámenes, los deberes, el levantarse pronto, el estudiar todas las tardes (algunos), las mochilas cargadas de libros, las collejas del pelo corto, las "bromillas" pesadas, los estuches desaparecidos, las clases de matemática que parecen de lengua, las clases de lengua que parecen física, el "me dejas un lápiz" y saber que no lo vas a volver a ver, las gomas que desaparecen extrañamente, las arduas y soporíferas clases de latín, los "¿Me invitas a un bocata"?, los "¿Me das algo? Es que tengo hambre", los palos laser del control de matemáticas, los deberes sin hacer, el "no me salía", los "¿Puedo ir al baño?", las discusiones de fútbol y las discrepancias sobre música, el miedo a que te pregunten la pregunta que no te sabes, los nervios antes de un examen, el decir "¿Qué toca ahora?", los lamentos por suspender, las alegrías por aprobar, las pruebas de educación física, las comida tan "rica" de la cafetería, los flashbacks de algunos, los empanamientos de otros, las extravagancias, las competiciones...
...pero sobre todo los profesores y los compañeros, amigos. Todo eso se va acabando poco a poco y no se puede impedir, tan solo pasa y tú lo dejas ir, no tenemos otra opción. Es inevitable.
Los amigos y los profesores se cambiarán, las mesas y las sillas se transformarán, unas extrañas paredes se volverán a alzar para atraparnos.
HISTORIA
Llegué en tercero de primaria (mucho tiempo atrás). Llegué antes que los demás. Pasé a una pequeña aula en la que solo había una gran mesa, y alguien me recibió.
Un cordial saludo. Yo se lo devolví. Me cogió del hombro y me dijo que la siguiese. El pasillo parecía interminable, giramos a la derecha. Una puerta, nos la encontramos de cara. Cogió el pomo, lo giró, abrió la puerta, una luz salió de dentro, entré en la clase, en la extraña habitación.
Estaban jugando entre sus pupitres, aviones volando, pelotas golpeando, personillas bromeando. Un poquito impresionado me quedé, pero se me pasó en cuanto la profesora me dijo que me presentara.
Todos se sentaron, algunas risillas un tanto risibles asomaron por el fondo. Yo, vergonzoso ante esa situación me presenté. La bienvenida me gustó, me aceptaron.
El recreo llegó. Yo no sabía dónde se encontraba el patio, asique me guiaron mis nuevos compañeros. Mientras bajábamos las escaleras se iban tirando el balón entre ellos. Por fin llegamos al patio, no era muy grande pero tenías sus entresijos. Había una cancha de baloncesto y otra de fútbol, y un recinto para los de la guardería.
Los días, las semanas, los meses, los años, los intercambios, los cursos, todo eso pasó muy deprisa. Y ahora ya estoy apunto de irme, de dejar lo que una vez fue mi infancia para recoger nuevas experiencias, hacer nuevas amistades, etc.
EN ESPECIAL...
... me querría despedir de toda la gente que me ha aguantado tantos años de tortura. En especial de los profesores, que han sido muy indulgentes conmigo, sobre todo en mi primera etapa en el colegio, por supuesto también a los que me aguantaron después.
... me querría despedir de mis amigos, que fueron cambiando hasta ser los que tengo ahora. De las amistades que fui ganando con el tiempo. De las amistades que fui perdiendo y pasaron a ser tan solo compañeros.
RECUERDOS...
...de pequeños.
... de intercambios.
... y más recuerdos sin fotos existentes.
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